GRANADA HOY
Más de 250 pacientes se benefician cada año de implantes procesados en el Banco de Tejidos de Granada
Cada año, más de 250 pacientes en la provincia mejoran su calidad de vida gracias al trabajo callado y casi desconocido del Banco de Tejidos. En sus instalaciones en el Centro de Transfusiones Sanguíneas de Granada se procesan huesos humanos donados que sirven para que los traumatólogos repongan tibias, húmeros, cúbitos o rellenen partes óseas devastadas por un tumor o un accidente de tráfico. La manipulación de estas piezas puede sonar más desagradable que la de un riñón, un corazón o un páncreas. Pero mejoran la vida de más pacientes en proporción con las donaciones de órganos.
Así, antes, por ejemplo, en la patología tumoral había que amputar. Ahora, el hueco que queda en el hueso tras ser extirpado un tumor se rellena con el material procedente de donante. Las intervenciones son posibles gracias a la colaboración del Banco de Tejidos con los servicios de Traumatología tanto de hospitales públicos como de privados, a los que abastecen las instalaciones. Las piezas enteras -tibia, húmero, cúbito, radio, fémur, peroné- suelen emplearse para restituir los huesos de pacientes con procesos cancerosos. Éstas se procesan generalmente a demanda ya que debe tenerse en cuenta la altura del paciente y que la extremidad sea la derecha o la izquierda.
Pero el banco también suministra fragmentos óseos. Estos se utilizan como relleno. Por ejemplo, cuando deben fijarse varios discos vertebrales, los traumatólogos emplean tornillos, pero también utilizan cuñas de hueso humano. En las intervenciones de cadera se colocan prótesis artificiales y además usan relleno óseo de donante. Es como una carpintería.
Y en la carpintería ha habido obras. El centro tiene una sala en la que se extreman las medidas de esterilidad y seguridad para que el procesamiento de las piezas sea óptimo. Los huesos donados, aunque ya son material inerte, deben conservarse congelados a 80 grados bajo cero. Esta temperatura no solo contribuye a su asepsia, sino a que no se desintegren como ocurre con el transcurso de los años en un cadáver.
Mientras la demanda por parte de los traumatólogos de piezas enteras es excepcional, la de material óseo de relleno -en fragmentos o molido- "es diario". Procesar, fragmentar o moler los huesos humanos es parte del trabajo del Banco de Tejidos. Puede sonar desagradable, pero quienes se benefician de estas técnicas seguro que lo agradecen.
En cuanto a los huesos, el Banco de Granada recibió en 2012 -procedentes de donaciones y compras- un total de 304 piezas de donaciones en el Virgen de las Nieves, el Clínico y el Hospital Torrecárdenas de Almería. Además, se compraron siete piezas al centro de Sevilla -tres cóndilo femoral, un platillo tibial y un fémur izquierdo- y dos al Transplant Services Foundation -un fémur derecho y un cóndilo femoral-.
De hueso y tejido osteotendinoso se distribuyeron el año pasado a los hospitales 283 piezas, la mayoría (108) al hospital de Traumatología de Granada.
En total se beneficiaron de los implantes de hueso y tejido osteotendinoso 190 pacientes.
Otro tejido que se manipula en el Banco es la membrana amniótica. Se recibieron 46 piezas, se implantaron 23 y se beneficiaron 21 pacientes, según la memoria de 2012 del Centro Regional de Transfusiones Sanguíneas de Granada.
En cuanto a los segmentos vasculares, se recibieron 20, se implantaron 14 y se beneficiaron 10 pacientes en quirófano.
También se almacenan córneas para pacientes con patologías del ojo. En 2012 el centro granadino recibió 34 córneas donadas y distribuyó también 34, de las que se implantaron 33 que beneficiaron a esos mismos pacientes.
Así, antes, por ejemplo, en la patología tumoral había que amputar. Ahora, el hueco que queda en el hueso tras ser extirpado un tumor se rellena con el material procedente de donante. Las intervenciones son posibles gracias a la colaboración del Banco de Tejidos con los servicios de Traumatología tanto de hospitales públicos como de privados, a los que abastecen las instalaciones. Las piezas enteras -tibia, húmero, cúbito, radio, fémur, peroné- suelen emplearse para restituir los huesos de pacientes con procesos cancerosos. Éstas se procesan generalmente a demanda ya que debe tenerse en cuenta la altura del paciente y que la extremidad sea la derecha o la izquierda.
Pero el banco también suministra fragmentos óseos. Estos se utilizan como relleno. Por ejemplo, cuando deben fijarse varios discos vertebrales, los traumatólogos emplean tornillos, pero también utilizan cuñas de hueso humano. En las intervenciones de cadera se colocan prótesis artificiales y además usan relleno óseo de donante. Es como una carpintería.
Y en la carpintería ha habido obras. El centro tiene una sala en la que se extreman las medidas de esterilidad y seguridad para que el procesamiento de las piezas sea óptimo. Los huesos donados, aunque ya son material inerte, deben conservarse congelados a 80 grados bajo cero. Esta temperatura no solo contribuye a su asepsia, sino a que no se desintegren como ocurre con el transcurso de los años en un cadáver.
Mientras la demanda por parte de los traumatólogos de piezas enteras es excepcional, la de material óseo de relleno -en fragmentos o molido- "es diario". Procesar, fragmentar o moler los huesos humanos es parte del trabajo del Banco de Tejidos. Puede sonar desagradable, pero quienes se benefician de estas técnicas seguro que lo agradecen.
En cuanto a los huesos, el Banco de Granada recibió en 2012 -procedentes de donaciones y compras- un total de 304 piezas de donaciones en el Virgen de las Nieves, el Clínico y el Hospital Torrecárdenas de Almería. Además, se compraron siete piezas al centro de Sevilla -tres cóndilo femoral, un platillo tibial y un fémur izquierdo- y dos al Transplant Services Foundation -un fémur derecho y un cóndilo femoral-.
De hueso y tejido osteotendinoso se distribuyeron el año pasado a los hospitales 283 piezas, la mayoría (108) al hospital de Traumatología de Granada.
En total se beneficiaron de los implantes de hueso y tejido osteotendinoso 190 pacientes.
Otro tejido que se manipula en el Banco es la membrana amniótica. Se recibieron 46 piezas, se implantaron 23 y se beneficiaron 21 pacientes, según la memoria de 2012 del Centro Regional de Transfusiones Sanguíneas de Granada.
En cuanto a los segmentos vasculares, se recibieron 20, se implantaron 14 y se beneficiaron 10 pacientes en quirófano.
También se almacenan córneas para pacientes con patologías del ojo. En 2012 el centro granadino recibió 34 córneas donadas y distribuyó también 34, de las que se implantaron 33 que beneficiaron a esos mismos pacientes.
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